(Estados Unidos) — No todas las redadas de inmigración en Estados Unidos son iguales. Las autoridades de inmigración de Estados Unidos llevan a cabo frecuentemente operativos con el fin de arrestar y deportar posteriormente a personas que se encuentran en el país sin autorización. No obstante, el tipo de redada puede variar dependiendo de la característica que lleva a las autoridades federales a realizarla.
Todas las redadas de inmigración en Estados Unidos buscan como fin la detención y remoción de individuos que ingresar al país ilegalmente o que tras su ingreso legal por medio de una visa permanecieron después del vencimiento del periodo de autorización. La meta de estos operativos es remover a dichas personas del país, aunque muchos enfrentan cargos penales antes de su expulsión.
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Algunos de los principales tipos de redadas de inmigración en Estados Unidos se describen a continuación:
Redadas de inmigración en lugares de trabajo
Este tipo de redadas de inmigración en Estados Unidos consisten en cumplir con una orden de allanamiento federal en un lugar de trabajo con el fin de arrestar a trabajadores indocumentados empleados por una compañía. La estrategia se basa en irrumpir en un lugar de trabajo bloqueando los puntos de salida para evitar la fuga de individuos sospechosos de trabajar sin documentos. Las autoridades proceden a arrestar a los trabajadores y a transportarlos a un centro de detención, donde los individuos son puestos posteriormente en un proceso de deportación. Una característica de esta clase de redadas de inmigración es que se llevan a cabo múltiples arrestos, incluso de hasta cientos de trabajadores indocumentados. Las redadas de inmigración en los lugares de trabajo se ejecutan en lapsos de un día o más, pero pueden abarcar varias semanas.
Redadas de inmigración en domicilios particulares
Mediante estos operativos, las autoridades de inmigración realizan arrestos de indocumentados en sus hogares, a los que ingresan en busca de un individuo en particular sobre el que puede pesar una orden previa de deportación. Las autoridades rastrean a personas de quienes ya tienen conocimiento que se encuentran en Estados Unidos sin autorización. Con frecuencia, algunas de estas detenciones de indocumentados se realizan cuando el individuo sale de su vivienda o llega a ella o bien en la cercanía de su lugar de trabajo. No obstante, también se detiene a personas individualmente en otros lugares que estas frecuentan.
Arrestos en centros carcelarios
Autoridades encargadas de hacer cumplir la ley de inmigración en Estados Unidos tienen acuerdos con autoridades locales (particularmente con los departamentos del alguacil de los condados) para arrestar a indocumentados tras su liberación de una cárcel o prisión. Esta táctica de detención se basa en identificar a indocumentados que tras ser arrestados o haber purgado una condena en cárceles o prisiones a nivel estatal, condado o ciudad, están a punto de ser liberados. Las autoridades de inmigración son notificadas por las agencias de cumplimiento de la ley locales de forma previa a la liberación de algún indocumentado que fue también infractor de la ley civil o penal a nivel local. Mediante este acuerdo entre autoridades federales y locales se evita que indocumentados infractores de la ley permanezcan libres en el país.
Redadas contra indocumentados criminales
Esta táctica se basa en arrestar a personas indocumentadas con antecedentes penales relacionados con diversos delitos con el fin de remover a criminales peligrosos del país. Las detenciones se basan en una sospecha de que el indocumentado puede estar sujeto a un proceso de deportación. Algunas personas arrestadas durante esta clase de operativo se enfrentan a enjuiciamientos penales federales antes de su deportación. Este tipo de detenciones difiere de aquellas de individuos que son procesados administrativamente por haber ingresado al país ilegalmente y que son posteriormente expulsados de Estados Unidos sin haber cometido algún crimen o delito. Por tanto, la característica que define a este tipo de redadas es el arresto de un indocumentado con antecedentes penales que pueden incluir condenas por crímenes como agresión, intento de asesinato, robo, negligencia infantil, explotación sexual infantil, violencia doméstica, conducir bajo la influencia, posesión de drogas, narcotráfico, fraude, atropellamiento y fuga, robo de identidad, reingreso ilegal después de la deportación, conducta indecente con un menor, lavado de dinero, obstrucción a la justicia, obstrucción de la policía, violación y agresión sexual, robo, allanamiento, ofensas con armas y otros. Hay que tener en cuenta que un extranjero que vuelve a ingresar a Estados Unidos después de haber sido deportado previamente comete un delito grave sancionable con hasta 20 años en una prisión federal, de ser encontrado culpable.
Redadas contra contrabandistas de personas
Estas redadas se centran en identificar, localizar y arrestar a contrabandistas de personas que operan organizaciones de contrabando en la frontera México-EE.UU. Estas redadas de inmigración en Estados Unidos persiguen a miembros de redes criminales transnacionales que explotan y ponen en peligro a las personas que introducen de contrabando al país. Con frecuencia estas redadas ocurren en las llamadas “casas de seguridad”, que son viviendas intermedias donde los contrabandistas esconden a extranjeros indocumentados provenientes por lo general de México y América Central. Estas redadas se llevan a cabo usualmente después de que las autoridades son alertadas acerca de la existencia de una casa de seguridad. Tras una redada de este tipo, quienes son identificados como contrabandistas enfrentan cargos federales y los indocumentados son deportados del país.
Redadas contra pandillas criminales
Otro tipo de redadas son las dirigidas contra pandillas trasnacionales cuyos miembros representan una alta peligrosidad y operan en Estados Unidos con nexos en otros países. Las autoridades federales se concentran en las pandillas de afiliación MS-13, también llamada Mara Salvatrucha. Esta pandilla criminal internacional tuvo sus orígenes en Los Ángeles, California en la década de 1980, aunque con el tiempo se extendió a muchas otras ciudades de Estados Unidos, así como a otros países como México y Canadá, y a América Central. La mayoría son ciudadanos salvadoreños, hondureños y guatemaltecos. En estas redadas, individuos arrestados son sometidos a un enjuiciamiento federal por reingreso después de la deportación, que es un delito federal. Quienes no enfrentan cargos penales son procesados para su expulsión del país. Otros sobre quienes pesan órdenes de deportación pendientes o que reingresaron sin autorización a Estados Unidos después de ser deportados son expulsados de forma inmediata del país bajo cargos federales. Otros se presentan ante un juez.
ENLACE EXTERNO → Sitio del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE.UU.
Aviso y descargo de responsabilidad: Este es solamente un artículo informativo o de opinión y NO representa ni pretende dar asesoría legal, ni sustituye los servicios de un abogado especializado en inmigración. Barriozona.com sugiere enfáticamente la asesoría de un abogado titulado y autorizado para ejercer el Derecho por las leyes de Estados Unidos.
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