(Estados Unidos) — En un nuevo informe publicado hoy, el Instituto de Política Migratoria (MPI) ha arrojado luz sobre el siempre controvertido tema de la inmigración no autorizada en Estados Unidos. El informe revela cifras sobre la población de inmigrantes no autorizados, basándose en datos de la Encuesta sobre la Comunidad Estadounidense (ACS) de 2021, la última disponible de la Oficina del Censo de Estados Unidos.
Según las estimaciones del MPI, en 2021 había aproximadamente 11.2 millones de inmigrantes no autorizados viviendo en Estados Unidos, frente a los 11.0 millones de 2019. Esto representa un aumento anual significativo, el mayor desde 2015.
Curiosamente, a pesar de la cobertura mediática regular de las llegadas caóticas a la frontera entre Estados Unidos y México, estos datos de 2021 no reflejan el número récord de encuentros fronterizos presenciados en 2022 ni los altos niveles observados este año.
Es fundamental señalar que estas estimaciones reflejan la población a mediados de 2021, un período en el que la movilidad global todavía se veía afectada por la pandemia de COVID-19. El tamaño de la población de inmigrante no autorizada no sólo está influenciado por las nuevas entradas sino también por las salidas. En 2020, tanto las llegadas como las salidas parecieron estar en niveles más bajos que en años anteriores.
Uno de los resultados más destacados del informe es la cambiante demografía de los inmigración no autorizada. El aumento de la población de inmigrantes no autorizados entre 2019 y 2021 se atribuye en parte al aumento de las llegadas irregulares a la frontera entre Estados Unidos y México. Este aumento en las llegadas fronterizas representa una mezcla de nacionalidades de América y más allá, incluida Europa.
El informe subraya la transformación en la composición de la población de inmigrantes no autorizados. Si bien México ha sido tradicionalmente el país de origen más grande de inmigrantes no autorizados, representando el 46 por ciento del total en 2021 (en comparación con el 63 por ciento en 2007), ha habido disminuciones en la población mexicana no autorizada compensadas por aumentos en las llegadas de otros países del Centro. América, América del Sur, el Caribe, África y más allá.
Sorprendentemente, la población de inmigrantes no autorizados se ha mantenido relativamente estable durante los últimos 15 años, rondando apenas por encima o por debajo de los 11 millones. Esta estabilidad es intrigante dado el alto número de encuentros con inmigrantes no autorizados por parte de las autoridades estadounidenses en la frontera entre Estados Unidos y México en los últimos años.
El informe ofrece una explicación para esta estabilidad, señalando que la población de inmigrantes no autorizados nunca ha sido estática. En tanto que nuevos inmigrantes ingresan al país, otros salen, algunos voluntariamente, mientras que otros mediante deportaciones y otros obteniendo un estatus legal. En particular, la disminución de la población de inmigrantes mexicanos no autorizados ha compensado los aumentos entre todos los demás grupos combinados.
El MPI también profundiza en las tendencias futuras y predice nuevos cambios en la población de inmigrantes no autorizados hacia 2023. Se espera que factores como la flexibilización de las restricciones de viaje de la era de la pandemia, los conflictos globales y los eventos climáticos conduzcan a un aumento de la migración en las Américas y en todo el mundo. La migración a través del hemisferio occidental se está volviendo más diversa en nacionalidades, y los inmigrantes llegan de países tan lejanos como Rusia, Turquía, Camerún e India.
Una tendencia notable destacada en el informe es la creciente complejidad del estatus legal de los inmigrantes en Estados Unidos. Más personas se encuentran ahora en un estado “crepúsculo”, que incluye el Estatus de Protección Temporal (TPS), la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) y los solicitantes de asilo. La ampliación de la elegibilidad para el TPS y la libertad condicional humanitaria por parte de la administración Biden ha aumentado esta complejidad.
A medida que navegamos por el panorama en constante evolución de la inmigración no autorizada en Estados Unidos, queda claro que el problema es multifacético y cambia constantemente. El informe del MPI ofrece información valiosa sobre el tamaño, la composición y las tendencias futuras de la población de inmigrantes no autorizados, proporcionando una imagen completa de un tema que continúa generando debates y discusiones en todo el país.
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